Lluvia en la selva

I
Llueve y el cristal
forma una cascada
que acaba en el barro.

Podríamos decir que esto es la selva.

Con sus rugidos y sus jerarquías,
con sus zumbidos y su monzón,
con su paz y con su sangre.

Sólo por la lluvia aguanto en esta selva.


II
Llueve y el amanecer
es una tormenta,
gris en la paleta de color.

No hay nadie hoy en la selva.

El descanso del huracán
apenas permite refugiarse
en un reducto de cultura

(al ser tan pequeño, ni la lluvia lo daña).


III
Llueve y la selva
es un caos
de corrientes y quietudes.

¿Pero cuándo no es un caos la selva?

La luz del rayo
y la aguja de la gota
doran y duermen a las bestias.

En el caos realmente hay cierta paz.

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